Como veterinarios con más de 20 años de experiencia en Cádiz, hemos detectado a lo largo del tiempo qué enfermedades tienen más probabilidades de desarrollar nuestros amigos felinos: desafortunadamente, los gatos también enferman. No importa lo bien que cuides a tu gato, muchas veces no podemos evitar que se pongan malitos una o dos veces durante su vida. La mayoría de las veces será algo fácilmente tratable, como pulgas o una infección de oído menor. Pero a veces los gatos se enferman gravemente y es una buena idea saber qué tipo de causas lo han provocado y sus tratamientos: ya sea por un virus, una infección o algún tipo de enfermedad, la mayoría de las afecciones pueden ser medicadas o corregidas de alguna manera antes de que se tornen más graves; la clave es detectarlas temprano. Hemos recopilado una lista de los diez problemas de salud más comunes para los gatos, qué significan y cómo se pueden solucionar.

  1. Enfermedad de riñón

La enfermedad renal es una amenaza muy grave para la salud de un gato. Si no se tratan los riñones que fallan, que desempeñan un papel esencial en las funciones diarias de su gato, puede incluso causar la muerte.

Los gatos mayores y los que salen más habitualmente al exterior, tienen muchas más probabilidades de desarrollar una enfermedad renal que los animales jóvenes de interior.

La enfermedad renal ocurre cuando el 75% o más del tejido del riñón no cumple con su función de filtrado, separando las toxinas del cuerpo.

9. Diarrea

Todos sabemos qué es la diarrea, pero ¿qué significa para los gatos? Si tu gato sufre de heces sueltas, acuosas o inconsistentes, tiene síntomas de diarrea. Si su gato tiene diarrea, no hay necesidad de entrar en pánico, a menudo la causa será simple, como una infección bacteriana pequeña o una intolerancia a los lácteos u otros alimentos. Sin embargo, si continúa durante varios días, es una necesidad acudir al veterinario para un chequeo y descartar problemas más graves.

8. Enfermedad dental

La enfermedad periodontal o «enfermedad de las encías» en los gatos es un problema común y ocurre cuando la placa (que es una bacteria) crece en la superficie de los dientes.Si la placa no se limpia de los dientes del gato, se convertirá en sarro (depósitos amarillos o marrones). El sarro es muy difícil de quitar y, si se genera debajo de la encía del gato, puede causar una infección grave. Si esta infección se sale de las manos, tu gato podría perder incluso dientes.La dieta de un gato puede ser un factor en el desarrollo de la enfermedad periodontal en gatos. Siempre trata de darle a tu gato una mezcla de alimentos secos y enlatados. La comida seca es una buena manera de ayudar a limpiar los dientes.

7. Huesos rotos

Especialmente común en gatos al aire libre, fracturas o fracturas de huesos pueden ocurrir fácilmente y pueden ser difíciles de identificar. Es bastante común que los gatos se caigan de una ventana o los árboles cuando están distraídos o asustados.¡No te pueden decir que están sufriendo!. Los signos a los que hay que prestar atención incluyen gemidos o aullidos con más frecuencia, más fuertes y durante más tiempo de lo habitual, pérdida de apetito e hinchazón en la zona afectada. Si tu gato gime cuando se toca suavemente, es probable que tengan dolor. Si sientes que tu gato puede tener un hueso roto, es esencial que lo lleves al veterinario para un chequeo lo antes posible, pues lo estará pasando realmente mal.

6. Estornudos

Esto es algo que nos preguntan a menudo. Cuando un gato estornuda puede significar diferentes cosas: la mayoría de las veces será una reacción alérgica a algo, o es posible que simplemente hayan recibido un cosquilleo en la nariz. Sin embargo, vigila si esto es frecuente o se alarga en el tiempo.

 

5. Gusanos del corazón (filarias)

Este es un parásito muy común que afectaba tanto a los perros como a los gatos, sin embargo, las vacunas modernas previenen la mayoría de los casos en España.Los gusanos del corazón son parásitos que crecen dentro del corazón y los pulmones del gato, y eventualmente llenan los órganos y los ahogan con el tiempo.Cádiz es una zona endémica para esta enfermedad, por lo que la vacunación es muy aconsejable para prevenir la salud de tu gato.

4. Las pulgas

Las pulgas, como probablemente ya sabes, son otra de las afecciones que casi todos los gatos pueden tener en su vida. De hecho, los estudios muestran que la mayoría de los gatos nacerán con pulgas o los tendrán por primera vez poco después de su nacimiento, especialmente los gatos callejeros o adoptados en lugares donde comparten espacio con otros, como en campo o criaderos exteriores.Se pueden eliminar fácilmente con el medicamento correcto y puedes encontrar una cantidad de productos a la venta cualquier tienda o en tu veterinario.

3. Virus de inmunodeficiencia felina

El virus de inmunodeficiencia felina es un virus similar al VIH en humanos que ataca el sistema inmunológico del gato y los hace más susceptibles a una variedad de otras enfermedades e infecciones. No puede ser curado pero puede ser controlado. Los gatos diagnosticados con virus de inmunodeficiencia felina requerirán tratamiento durante el resto de sus vidas para ayudarlos a combatir la infección.

2. Cáncer

Desafortunadamente, al igual que nosotros, los gatos a menudo desarrollan cánceres a medida que envejecen y sus cuerpos comienzan a envejecer.Los gatos pueden sufrir de todos los tipos de cáncer que padecemos, como linfoma, melanoma, cáncer de mama e incluso cáncer de próstata, por nombrar algunos.El tratamiento del cáncer puede tomar forma de cirugías, quimioterapia o radioterapia. Como todos los tipos de cáncer, lo más importante es detectarlo temprano, así que trata de palpar a tu gato habitualmente por si encuentras bultos o manchas inusuales en la piel, las orejas y los ojos.

1. Obesidad

Otra condición común entre los gatos y que a menudo no se nota ni se toma en serio es la obesidad.Si tu gato es obeso, entonces se arriesga a desarrollar todo tipo de afecciones relacionadas, como enfermedades cardíacas, renales, artritis y muchas más. Los gatos de interior y esterilizados son especialmente propensos a desarrollar problemas de peso y la dieta debe controlarse adecuadamente.Habla con tu veterinario si crees que tu gato puede tener sobrepeso.